La ética profesional, también llamada deontología, determina los valores morales que deben ser puestos en práctica en el ejercicio de una profesión.
En la práctica, los códigos de ética o códigos deontológicos, incluyen criterios y pautas de acción para fomentar las buenas prácticas laborales que deben seguir los profesionales de determinado sector. Estos principios éticos rigen, por ejemplo, en los códigos de ética de profesionales de la medicina, de abogados, de traductores.
Precisamente el Colegio de Traductores Públicos de la Ciudad de Buenos Aires redactó un Código de Ética al que debemos atenernos todos los traductores matriculados en esta institución.
Nuestro Código de Ética establece que el principio general que rige todas las disposiciones allí incluidas es el de la protección de la dignidad de la profesión del traductor. Por supuesto, los invito a seguir el vínculo e interiorizarse de cada una de las disposiciones, pero es interesante destacar que el Código detalla ante quiénes el traductor tiene responsabilidades éticas: en primer lugar, con la dignificación de la propia profesión; luego, con el Colegio de Traductores propiamente dicho; también con sus clientes; y en último lugar, pero no menos importante, responsabilidad hacia sus colegas.
Sólo para nombrar algunos, van a modo de ejemplos de ética profesional el guardar el secreto profesional, el respeto hacia el trabajo de los colegas y la solidaridad con ellos, actuar en los idiomas en los que el traductor está matriculado, así como procurar el reconocimiento de los derechos de autor.
Durante el desarrollo de la profesión, en muchas oportunidades surgen cuestiones morales que resolver, y es muy importante que el Código de Ética actúe como faro para guiarnos con seguridad hacia la justicia, la veracidad, la equidad. Y también es valioso saber que todos los colegas se rigen con los mismos criterios de responsabilidad y honestidad. No olvidemos nunca que nuestra profesión hace a la armonía social y el bien común, con lo cual nuestra responsabilidad ética es aún mayor.
Dejo abiertos los comentarios para encontrarnos allí, ¡los leo!
Comentarios
Publicar un comentario